El Comité Olímpico Internacional (COI) firmó a Anheuser-Busch InBev como la primera marca de cerveza en los 40 años de historia de su programa de patrocinio. El principal argumento para la relación es que gana miles de millones de dólares para la organización y los deportes internacionales.
El acuerdo fue anunciado por el COI y AB InBev, el gigante cervecero con sede en Bélgica, cuyas marcas incluyen Budweiser, Corona, Michelob y Modelo, para los próximos tres Juegos de Verano e Invierno. Los Juegos Olímpicos de París se inauguran el 26 de julio de 2024, y el acuerdo también incluye los Juegos de Invierno de 2026 en Italia y los Juegos Olímpicos de Los Ángeles en 2028.
Corona Cero, bebida sin alcohol de la marca Corona que está clasificada como la segunda más valiosa en todo el mundo en la industria cervecera, será el «patrocinador mundial de la cerveza de los Juegos Olímpicos», dijeron los organizadores. El valor del acuerdo no se reveló, aunque el COI ha dicho que algunos de sus patrocinadores pagan más de 300 millones de dólares para estar en el programa The Olympic Partner durante un acuerdo comercial de cuatro años. En promedio, una Corona Cero de 355 ml cuesta 15 pesos mexicanos.
El presidente del COI, Thomas Bach, dijo que «nuestras organizaciones comparten la visión de apoyar el deporte y a los atletas. Corona Cero involucrará a los fanáticos de todo el mundo para celebrar la magia de los Juegos Olímpicos y animar los logros deportivos de los atletas». De acuerdo con la Agenda Olímpica 2020+5, ambas organizaciones están contribuyendo activamente a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.
El Comité nunca había firmado una marca de cerveza o alcohol para su evento global, que es ampliamente visto como el pináculo del logro atlético, con un número creciente de jóvenes medallistas adolescentes en nuevos deportes como el skate. Sin embargo, las ofertas de cerveza son una rutina para los organizadores locales. Los funcionarios chinos, por ejemplo, firmaron a Budweiser como la cerveza internacional de los Juegos Olímpicos de Pekín 2008.
Las ventas de cerveza, vino y licores sin alcohol han estado creciendo más rápido que las ventas de sus contrapartes alcohólicas durante varios años, contrastado con las preocupaciones de los bebedores más jóvenes sobre la salud y el bienestar y una tendencia general hacia la moderación. Entre 2018 y 2023, las ventas de bebidas no alcohólicas en los 10 principales mercados que las venden crecieron un 70% a más de 8,500 millones de dólares, según IWSR Drinks Market Analysis. Las ventas de bebidas alcohólicas en esos mercados crecieron 14% a 470 mil millones de dólares.
NotiPress/Gustavo Torres