El tratamiento de la nueva ley Bases en Argentina introdujo un capítulo de modernización laboral que promete transformar el panorama para empleadores y trabajadores por igual. Esta reforma legislativa, que aún está en proceso de discusión, busca principalmente reducir los litigios laborales y dar más libertad al trabajador para gestionar su indemnización. Así lo expresó Manuel Adorni, vocero presidencial, durante la conferencia de prensa desde Casa Rosada el 15 de mayo de 2024.
Uno de los aspectos más destacados de la reforma es su enfoque en desmantelar lo que se ha denominado «la industria del juicio». Según la nueva ley, dijo Adorni, un empleador podría enfrentar demandas que demandan entre ocho y diez millones de pesos por un empleado con apenas un año de antigüedad y un sueldo mínimo. Estos costes, que actualmente pueden desviar fondos significativos de la producción a los bolsillos de abogados especializados en litigios laborales, han sido un factor disuasivo para la contratación, especialmente en el sector de las pequeñas y medianas empresas (pymes).
La reforma también introduce el «fondo de cese«, una herramienta que permitiría a los trabajadores recibir un aporte mensual acumulativo destinado a su indemnización, que se haría efectivo al finalizar la relación laboral. Este cambio busca ofrecer a los empleados más autonomía sobre sus compensaciones sin sacrificar la seguridad que proporciona la indemnización por despido.
Para los emprendedores, la propuesta legislativa abre nuevas posibilidades al permitir la contratación de hasta cinco trabajadores bajo una relación autónoma. Este punto es particularmente relevante para los monotributistas que necesitan colaboradores pero temen las implicaciones legales de establecer una relación laboral formal.
Así, el contexto actual en Argentina muestra un panorama donde, a pesar del deseo de los empresarios por expandir sus operaciones y contratar más personal, el miedo a las consecuencias legales lo impide. La nueva ley busca proporcionar las certezas necesarias para revitalizar el mercado laboral y estimular el crecimiento económico, explicó el portavoz de la Casa Rosada.
Esta reforma laboral, que aún necesita pasar varias etapas de aprobación antes de su implementación, es vista por muchos como un paso crucial hacia un entorno empresarial más dinámico y menos restrictivo en Argentina. Sin embargo, también enfrenta críticas de sectores que temen pueda reducir los derechos laborales bajo el pretexto de simplificar la contratación.
NotiPress/Francisco Vicario